Derecho a tener un contrato de procedimiento de inseminación artificial

Tribunales:
Corte Suprema de los Estados Unidos
País:
Estados Unidos de América
ROL/RIT de identificación:
In the Interest of K.M.H., 285 Kan. 53, 169 P.3d 1025 (2007)

Una madre concibió a sus hijos por medio de un procedimiento de inseminación artificial.  El procedimiento fue realizado con esperma de un donante. El donante solicitó que las cortes nacionales determinaran si tenía derechos como padre.  La madre solicitó a las cortes nacionales que decidieran en cambio que el donante no tiene ningún derecho a ser padre legal de los menores bajo la ley de Kansas. La ley de Kansas sostiene que el donante de espermatozoides en un proceso de inseminación artificial no tiene derechos como padre, a menos que el donante y la mujer involucrada entren en un acuerdo por escrito que indique lo contrario.  El donante sostuvo en particular ante las cortes nacionales que la ley de Kansas viola su derecho fundamental a ser padre protegido por las Cláusulas de Protección a la Igualdad y Debido Proceso de la Enmienda XIV de la Constitución.

La Corte Suprema de Kansas consideró la ley constitucional. En el contexto de la inseminación artificial, la paternidad biológica en sí misma no establece ningún derecho a participar en las decisiones de crianza protegido por las Cláusulas de Protección a la Igualdad y Debido Proceso de la Enmienda XIV de la Constitución. La ley avanza un interés legítimo del estado en proteger a todas las partes involucradas – donantes, madres, e hijos – de reclamos por apoyo financiero. La ley toma en cuenta que tanto las mujeres casadas como las solteras pueden convertirse en madres sin tener relaciones sexuales, ya sea por elección personal o porque un esposo o pareja sea infértil, impotente, o tiene una enfermedad. El requerimiento legal de que un acuerdo de procedimiento de inseminación artificial no otorgue derechos al donante a menos que sea por escrito asegura que el acuerdo sea claro, previsible, y pueda ser ejecutado. La mayoría de los estados con leyes de inseminación artificial afirman que el esposo de la mujer involucrada es el padre legal. Las dos partes del contrato son libres de entrar en cualquier otro acuerdo distinto; pueden hacerlo por escrito. La ley justificadamente impide la creación de un estatus como padre cuando no es deseado o previsto. La ley simplemente provee información de cómo ser o no ser padre a un donante.