Miguel González Castro fue uno de los principales forjadores de las instituciones republicanas de nuestro país en el siglo XIX.
Entre otros cargos, se desempeñó como presidente del Supremo Tribunal de Justicia del estado de Colima en 1859, posteriormente inspector general de Instrucción Pública, rector del Liceo de Varones, titular del Registro Público de la Propiedad y en 1873 primer juez de Distrito en la entidad.
Siendo presidente del Supremo Tribunal de Justicia propuso reformar la Ley de Administración de Justicia para que, con fundamento en el principio de la división de poderes y en ejercicio de su independencia, se le reconociera al Poder Judicial la facultad para designar a sus integrantes, exceptuando a los magistrados. En este sentido, hizo notar al entonces gobernador Francisco Santa Cruz y al Congreso que dicho órgano jurisdiccional había sido privado de la facultad que legítimamente le correspondía como poder independiente.
Murió el 17 de junio de 1894.